jueves, 11 de noviembre de 2010

Diáfano

Diáfano durmió durante los días dificiles del duelo.

***

Marcela tomó la alianza de su madre y la miró con una rauda lentitud
El anillo se atemorizó y oscureció sus diamantes de estrellas.

***

Grande era la meta soñada
Grande desafío le acompañaba
Grande infortunio le atemorizaba
y le hacía despertar de madrugada.

Otra vez

Hay un rastro de llantos en el intento.
Donde inicia el infierno esta el intento.
Desandaré mis pasos y anudare el viento.
Enterraré las dudas, con otro intento.

Árido

El bosquejo del hoy, es un desierto
Mirada que no alcanza, es un desierto
Silencio, ruido del alba, es un desierto
Y esta asfixiante distancia, también
es un desierto

Tú sabes

Del sueño que escapo al insomnio, quiero saber
Del ataque sutil de la esgrima, de la espada que no hiere
quiero saber
De la hazaña olvidada por el tiempo, quiero saber
De las costumbres que escondes, de los lugares que arden
quiero saber.

lunes, 25 de octubre de 2010

Buscando

Busco tus sueños en mi almohada
busco tu tiempo en mi reloj
busco tu savia en mi planta
para encontrarme solo en mi sillón

Búscame en tus días sin minutos
búscame en tus viajes sin andén
búscame en tus historias más largas
para anunciarte un ya no estoy

Alí

No aproveché la muerte del poeta,
no aproveché ni siquiera su vida.
Celebro sus versos, sus letras, sus rimas,
porque terminó sus ensayos de adioses,
y al final, siempre al final,
concretó su partida.

Nokia

Eres un faro
Pista iluminada
pantalla nocturna
buscando una mirada

¿Qué haría yo a estas horas?
¿Configuración asistida?
Sino guardara sus mensajes
en tu memoria reducida

¿Y qué sentiste?

¿Y qué sentiste cuando sobre ti
descansó sus labios?

¿Y qué pensaste cuando en tu cuerpo
descargó el cansancio?

¿Y qué hay de aquel día
en que enfermó a ratos?

¿Y qué era lo que le sucedía
cuando rompió en ti en llanto?

¿Cuántas noches compartieron?
¿cuántos días? ¿cuántos años?

¿Cuántas cosas decidieron
mientras él estaba a tu lado?

¿Cuántas frías madrugadas
calentó él con sus manos?

¿Cuántas largas desveladas
le acompañaste pensando?

¿De cuántos sueños fuiste cómplice,
y te hacía sentir humano?

¿En cuántos despechos fuiste
la única en consolarlo?

Fuiste tú, sin duda, tú
quien lo esperaba a diario.

Fuiste tú, su almohada,
su refugio más preciado.

sábado, 23 de octubre de 2010

Y aún siento frío

Y aún siento frío,
porque se fue de mi vida,
porque me mandó al olvido,
porque robó mi sonrisa,
porque me dejó el vacío.

Y aún siento frío,
porque me inunda el silencio,
porque me invade el hastío,
porque me aborda el deseo,
porque él ya no es mío.

Y aún siento frío,
porque abundan recuerdos,
porque me ahogo en suspiros,
porque lo siento tan lejos,
porque quedé sin su abrigo.

No se recuerdan

No se recuerdan las peleas,
se recuerdan las sonrisas.

No se recuerdan las manos,
se recuerdan las caricias.

No se recuerdan los momentos,
se recuerda el día a día.

No se recuerdan las palabras,
se recuerda la ironía.

No se recuerda lo malo,
te recuerdo a ti, vida mia.

Silencios

La suave sensación de sus silencios
serenaba sus suspiros día a día,
suscitando sospechosos sobresaltos,
sepultando sus sentidos, su ironía.